La asamblea onubense aprueba por unanimidad un manifiesto a favor del cumplimiento de los Derechos Humanos
La asamblea ciudadana celebrada el pasado 10 de septiembre en el Campus de La Merced de la Universidad de Huelva aprobó por unanimidad de todos los asistentes un manifiesto a favor del cumplimiento de los Derechos Humanos en la crisis humanitaria que se está viviendo en el Mediterráneo y que afecta a miles de refugiados de diferentes países.
Desde Ahora en Común-Huelva se quiere hacer así constar la solidaridad del pueblo onubense con las víctimas de la guerra e insta a los responsables de los países europeos a unir fuerzas en el estricto cumplimiento de los artículos 13 y 14 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
La asamblea denuncia la parsimonia de la Unión Europea ante la crisis humanitaria y migratoria y señala su responsabilidad directa por su participación en diversos conflictos en Oriente Medio, por lo que “no hay excusas” para no poner sobre la mesa todos los medios disponibles para ayudar a los afectados.
A continuación se muestra el manifiesto íntegro y en los términos exactos en los que fue aprobado en la asamblea.
MANIFIESTO DE AeC HUELVA ACERCA DE LA CRISIS HUMANITARIA EN EL MEDITERRÁNEO
“ Frente a quienes construyen muros,
alzan vallas, instalan concertinas,
nosotros tenemos un mensaje :
refugiados /as, sed bienvenidos “.
Ada Colau, Barcelona 4 de septiembre 2015, I Encuentro de Ciudades por el Bien Común
En la III Asamblea Abierta de Ahora en Común Huelva, celebrada el pasado 2 de septiembre en la Plaza de la Constitución de nuestra capital, se realizó un emotivo recuerdo a los alrededor de 3000 muertos contabilizados en el Mediterráneo en lo que va de año por las Agencias Internacionales de la ONU de Ayuda al Refugiado. Igualmente se realizó expresa mención a los cientos de miles de mujeres, hombres, niñas y niños que huyen por este Mar desde sus países de origen, como Siria, Afganistán, Irak u otros, asolados por las guerras y el terrorismo islámico, hacia los países de la vieja Europa. Buscan asilo, y también mayores recursos y oportunidades en los países europeos que se proclaman al menos formalmente, como Estados de Derecho democráticos y respetuosos con los Derechos Humanos.
Desde la Plataforma y movimiento ciudadano Huelva en Común, dando coherente respuesta a este pronunciamiento, justo el día de su presentación pública, queremos expresar como colectivo ciudadano nuestra rabia e indignación, y denunciamos, la parsimonia de las instituciones de la UE, e incertidumbres y escasa determinación de sus Estados miembros, para afrontar una crisis humanitaria sin precedentes desde la II Guerra Mundial.
Ahora en Común Huelva, con este manifiesto que propagamos a toda la ciudadanía y a todos los medios de comunicación de la provincia, recogemos el espíritu ya formulado en nuestro llamamiento a la confluencia del día 28 de Julio en defensa de los Derechos Humanos y de las personas migrantes, incluyendo , por tanto , y como no puede ser de otra manera, a quienes huyen de sus países de origen por su fundado temor a ser perseguidos o asesinados por motivos de raza, religión, pertenencia a determinado grupo social u opiniones políticas.
La ciudadanía pide a la política, y especialmente a Europa, que no ponga excusas, con una responsabilidad muy marcada y determinada por su criminal intervención militar en determinados conflictos, como Irak, Libia u otros, así como por su política disuasoria funesta e inhumana en materia de fronteras. En el mes de agosto la Comisión Europea aprobó destinar 521,7 millones de euros a España en el marco de su programa para dar respuesta a la migración y al asilo, y , ante la inoperancia, lentitud e indeterminación del Gobierno español, muchas ciudades del Estado, algunas Comunidades Autónomas, ONG y Colegios profesionales de distinto signo, han comenzado a organizar toda una Red de Ciudades Refugio y de alternativas legales y asistenciales, primero, para dar respuesta a la multitud de ofrecimientos de ayuda que miles de ciudadanos de bien han trasladado a sus alcaldes y autoridades, y segundo, para atender la emergencia de asilados y refugiados que sin duda en los próximos meses habrán de venir a España.
En efecto, todos aquellos que están viajando en trágicas circunstancias, que recalan en las costas del sur de Italia, Islas griegas ó Turquía, arriesgando de nuevo sus vidas cruzando la peligrosa ruta del Mediterráneo y utilizando en su huída los medios más inseguros de transporte, con la connivencia criminal de los indeseables traficantes de seres humanos, merecen que sus Derechos Humanos y su dignidad sean plenamente respetados y reconocidos independientemente de su situación legal. Así lo exigen los puntos 13 y 14 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos; al igual que la Convención sobre El Estatuto de los Refugiados de Ginebra de 1.951 y el Protocolo del Estatuto del Refugiado, hecho en Nueva York en 1.967, ambos vigentes para España desde el 12 de Noviembre de 1.978. No se debe olvidar, por tanto, la responsabilidad concreta que tienen los Estados frente a los Refugiados, según el Derecho Internacional, que garantiza el asilo a quienes “debido a fundados temores de ser perseguidos por motivos de raza, religión, pertenencia a determinado grupo social u opiniones políticas, se encuentran fuera del país de su nacionalidad y no pueden o, a causa de dichos temores, no quieren acogerse a la protección de tal país “.
Por consiguiente, circunstancias excepcionales requieren una respuesta excepcional: Europa no puede continuar respondiendo a esta crisis humanitaria con un enfoque fragmentado que la ha llevado en general a fracasar, brindando una respuesta común eficaz. Se necesitan, no blindajes de fronteras, sino políticas estructurales de cooperación internacional que intervengan sobre las raíces del problema en los países de origen : políticas de integración , de respeto a los Derechos Humanos, de creación de empleo, de renuncia explícita al narcotráfico y al tráfico de armas, así como el compromiso multilateral a no promover golpes de estado que desestabilizan política y económicamente estos países azotados por las guerras ; y , por supuesto , también es imprescindible, y va de suyo con lo anterior, el cumplimiento escrupuloso y diligente de la legalidad internacional.
Fuente e imagen: Ahora en Común Huelva.
