Desde Mesa de la Ría afirman que los los fosfoyesos son residuos tóxicos y peligrosos que afectan a la salud de quienes viven a tan poca distancia de este vertedero ilegal. A ello se une que Fertiberia durante años ha depositado ilegalmente estos fosfoyesos, como así lo establece una sentencia de la Audiencia Nacional que obliga a la restauración de la zona, y exigen la retirada total de estos residuos, del Cesio-137 procedente de las cenizas de Acerinox y demás residuos vertidos en la Marismas del Rincón y de Mendaña (Zonas 2,3,4), es decir, de todos los residuos depositados en las 720 hectáreas de la Concesión a Fertiberia, así como el resto de residuos vertidos en las contaminadas marismas del Pinar (zona 1) que gestionadas por el Puerto de Huelva fueron contaminadas, sin concesión alguna, hasta llegar las 1.200 hectáreas afectadas.
También y como segundo factor se exige la mejor y máxima descontaminación de los terrenos ocupados por las industrias que han cerrado en la Avenida Fco. Montenegro (confluencia de los ríos Tinto y Odiel, denominada Punta del Sebo), mediante la declaración expresa de terrenos contaminados, recuperándolos íntegramente para el uso y disfrute de la ciudadanía, tal y como era antes de la implantación del Polo Químico Franquista.
Y por último se solicita que se cumpla la aspiración histórica de la ciudad, que es la restitución progresiva y escalonada de los terrenos ocupados por la industrias y la restauración de los espacios contaminados por ellas, para lo que hace justo 10 años, se recogieron más de 20.000 firmas reclamando la celebración de un referéndum, que el Ayuntamiento ignoró, cuando los ciudadanos ocuparon la Punta del Sebo en la Gran Garbanzada del 12 de octubre de 2004.
Fuente e imágenes: Mesa de la Ría.
