La adquisición ha requerido una inversión de 332.000 euros
Se encuentra dotado de diferentes prestaciones que facilitan un diagnóstico más preciso y menos invasivo de la patología mamaria
El Hospital de Riotinto, perteneciente al Área de Gestión Sanitaria Norte de Huelva, ha incorporado en las últimas semanas un mamógrafo digital de última generación, entre los más avanzados actualmente en el sector a nivel internacional, que le permite reforzar su capacidad diagnóstica en el ámbito del tratamiento y abordaje de la patología mamaria, especialmente en mujeres más jóvenes.
La adquisición ha requerido una inversión de un total de 332.000 euros según se indica desde la Junta. Esta actuación forma parte del programa de renovación del equipamiento electromédico que la Consejería del ramo viene ejecutando desde el año pasado en el hospital onubense, fruto de una partida que alcanza los 2 millones de euros, financiada en su conjunto con fondos europeos de desarrollo regional.
El nuevo mamógrafo cuenta con un dispositivo de adquisición de imágenes digital directa 2D y 3D, sistema de procesamiento y visualización de imágenes, además de estar provisto de accesorios para la realización de estudios mamográficos con tomosíntesis y estereotaxia digital y biopsia guiada.
Se trata de diferentes prestaciones, recomendadas por especialistas en radiología, que posibilitan la detección de lesiones mamarias con mayor precisión, sensibilidad y eficacia y menores dosis de radiación a las pacientes, a la vez que la realización de procedimientos intervencionistas mucho menos invasivos.
Con ello se quiere reforzar la asistencia en acto único que se ofrece a las pacientes en este ámbito desde el hospital, consistente en que el mismo día se les realiza, si lo precisan, mamografía, ecografía de mama y axila y biopsia, lo que disminuye los desplazamientos al centro en una zona de dispersión geográfica como es esta.
El nuevo equipo también dispone de tecnología digital puntera, lo que conlleva un incremento de la calidad de las imágenes al obtener un mayor contraste y definición, entre otras numerosas ventajas, como la disminución de la necesidad de repetición de estudios y, en consecuencia, la exposición a menores dosis de radiación y la reducción de traslados innecesarios a las pacientes, a las que hay que añadir la utilización de un sistema mucho más respetuoso con el medio ambiente. Igualmente favorece que las imágenes queden integradas en la historia de salud digital de la paciente y puedan ser analizadas por los facultativos en el ordenador al instante de su realización, manteniéndose archivadas para cualquier otro estudio.
La puesta en marcha del mamógrafo ha ido acompañada de la adecuación de la sala que lo alberga, en la que se ha procedido a la colocación de vinilos decorativos, en consonancia con las medidas de humanización de la asistencia que se están acometiendo por parte del área sanitaria en el centro hospitalario.
Programa de Detección Precoz del Cáncer de Mama
Una de las principales funciones de este dispositivo es el desarrollo entre las personas usuarias del Área de Gestión Sanitaria Norte de Huelva del Programa de Detección Precoz del Cáncer de Mama del Servicio Andaluz de Salud, una prestación de cribado que facilita a las destinatarias (el grupo original de mujeres de 50 a 69 años de edad se está ampliando progresivamente con el objetivo de alcanzar al final de esta legislatura a toda la población femenina de 40 a 75 años) el acceso a exploraciones mamográficas de forma protocolizada para detectar cuanto antes la aparición de la enfermedad e instaurar de forma rápida el tratamiento.
El cáncer de mama es la primera causa de muerte por patología tumoral en el colectivo femenino en todos los países occidentales. El diagnóstico temprano de esta enfermedad mediante mamografías es fundamental no sólo para reducir su mortalidad, sino también para poder actuar en sus fases iniciales, aplicar tratamientos menos agresivos y elevar así la calidad de vida de las mujeres. De hecho, se estima que la detección precoz, cuando el tumor no está extendido ni evolucionado, eleva el porcentaje de curación hasta el 90%. Además, actualmente en el 70% de los casos se puede conservar la mama tras la extirpación.
La previsión es que de media al año se lleven a cabo un total de 4.200 pruebas mamográficas con el nuevo equipo.
