- La conclusión del periodo de alto riesgo conlleva una mayor actividad humana en los espacios forestales de Andalucía
La Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, a través del dispositivo para la prevención y extinción de incendios forestales de Andalucía, Plan INFOCA, insta a los ciudadanos a mantener la precaución una vez finalizado el periodo de alto riesgo de incendios forestales, que discurre del 1 de junio al 15 de octubre. No obstante, el dispositivo ha realizado 130 intervenciones del 1 de enero al 31 de mayo, es decir, fuera de la campaña de extinción.
A partir del 16 de octubre, queda sin efecto la prohibición de realizar barbacoas en zonas habilitadas para tal fin, quemas agrícolas, así como el paso de vehículos a motor por espacios forestales y zonas de influencia forestal en Andalucía (franja de 400 metros alrededor de las zonas forestales), todo ello conlleva una mayor actividad en los montes andaluces, sobre todo de carácter lúdico y de actividades agropecuarias relacionadas con el manejo del fuego.
En el caso de las quemas, serán las Delegaciones Territoriales de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio las que podrán conceder o no las correspondientes autorizaciones atendiendo a las condiciones meteorológicas de cada provincia. De hecho, la Delegación Territorial de Almería ha prorrogado la prohibición de quemas agrícolas en espacios forestales o de influencia forestal hasta el 15 de noviembre.
Pese a que el periodo de alto riesgo de incendios forestales en Andalucía concluye mañana 15 de octubre y las últimas precipitaciones acumuladas han paliado en algo el estrés hídrico de la vegetación, se pueden producir siniestros en otoño e incluso en invierno, máxime con el contexto meteorológico que Andalucía ha sufrido a lo largo del año, con escasez de lluvias, nulas en parte de la región, y temperaturas que han batido récords. El año 2016 ha sido el tercero más cálido de este siglo sólo superado por 2013 y 2015.
Estadísticas 2016
Hasta el 9 de octubre, el dispositivo INFOCA ha realizado un total de 721 intervenciones forestales, de las que 583 (80,86%) quedaron reducidas a conatos –fuegos que no alcanzan la hectárea-. La superficie afectada suma 3.430,04 hectáreas de terreno forestal, de las que 934,70 corresponden a terreno arbolado y el resto a matorral, una cifra muy por debajo de la media del decenio establecida en 5.750,75 hectáreas.
Fuente: Plan INFOCA.
Imagen: José Carlos Sánchez Rodríguez (Infonuba).
