Ante el continuo y preocupante aumento de casos de COVID-19 que se está produciendo en las últimas semanas en España, SEPAR, SEMI, SEIMC, SEMES, SEDAR, SEMPSPH y SEMERGEN, SEMFYC y SEMG como Sociedades médico-científicas que reúnen a la mayor parte de los profesionales sanitarios que prestan asistencia sanitaria a los pacientes con Covid-19, ha manifestado que los profesionales sanitarios están constatando que, en las últimas semanas, están aumentando los diagnósticos de nuevos casos en los centros de salud, y en hospitales, en las unidades de cuidados críticos e intensivos, en los servicios de urgencias y emergencias, y neumología, lo que puede llevar a corto o medio plazo a un nuevo colapso de la sanidad.
Asimismo indican que las medidas que se están tomando no son suficientes para controlar la transmisión de la infección por lo que es imprescindible que se pongan en práctica nuevas medidas coordinadas, rápidas y eficaces entre la Administración sanitaria central y las Administraciones sanitarias autonómicas. Además advierten que de seguir la situación así y si no se adoptan nuevas medidas para atajarla, existe una alta probabilidad de volver a enfrentarnos a situaciones asistenciales tan graves como las vividas durante el estado de alarma, hace apenas unas semanas.
A través de este comunicado, se quiere advertir a la población general, y especialmente a los jóvenes, que es de suma importancia cumplir estrictamente las medidas de prevención que dictan las autoridades sanitarias: utilizar siempre las mascarillas, mantener la distancia de seguridad, lavado frecuente de manos y evitar las aglomeraciones; así como cumplir los periodos de cuarentena indicados.
También quieren advertir a las autoridades sanitarias que los profesionales de la salud deben disponer de unas adecuadas existencias de equipos de protección individual, reactivos para la realización de pruebas, fármacos, ventiladores, recursos para proporcionar oxigenoterapia y que, además, se debe contratar el personal sanitario necesario para que no se repita el desabastecimiento de recursos materiales y humanos vivido durante la primera oleada de la pandemia.