Esta medida estará vigente desde este sábado, 1 de junio, al 15 de octubre, periodo de alto riesgo de incendios forestales
Se prohibe usar fuego y transitar con vehículos a motor en espacios forestales por el riesgo de incendios
La Junta de Andalucía informado hoy de que, durante el periodo de alto riesgo de incendios forestales, es decir, desde mañana 1 de junio hasta el 15 de octubre, está prohibido el uso del fuego y la circulación de vehículos a motor en los espacios forestales y de influencia forestal, terrenos situados en una franja de 400 metros alrededor de estas zonas. Así, la prohibición afecta tanto a las quemas agrícolas y restos de vegetales como a la preparación de alimentos en las barbacoas, incluso en las áreas recreativas.
Está permitido, previa autorización de la delegación del Gobierno de la provincia correspondiente, cocinar alimentos en campamentos infantiles y el uso de calderas de destilación, hornos de carbón y piconeo. Asimismo, también podrán realizarse barbacoas en establecimientos de alojamientos turísticos y en restaurantes rurales que, en ambos casos, estén previamente autorizados para ello.
En lo referente al tránsito de vehículos a motor, entre los pocos casos contemplados como excepcionales se encuentran, por ejemplo, el uso de las servidumbres de paso, los servicios de emergencias y extinción de incendios forestales, así como las actividades ecoturísticas autorizadas.
Al respecto se explica que la última semana de mayo ha venido marcada por un aumento significativo de las temperaturas, lo que ha incidido negativamente en el estrés hídrico de la vegetación, más disponible ante un incendio. Además, las precipitaciones registradas en marzo han provocado la proliferación de pastos.
En este marco se ha instado a la ciudadanía a colaborar de forma activa, alertando de cualquier avistamiento de humo o llama, a través del teléfono 112 para, de esta manera, cooperar en la puesta en marcha de los equipos de extinción de la forma más rápida posible. Asimismo, se ha hecho un llamamiento a la prudencia y a la responsabilidad de la ciudadanía durante su estancia en el medio natural, a la que pide una actitud responsable cuando se encuentre en contacto con la masa forestal.
De esta forma, se pueden evitar incendios que puedan poner en peligro a núcleos urbanos, a la naturaleza y a los propios equipos de extinción.