La Diputación colabora a través del Banco de Alimentos, y subraya la “imprescindible labor” del voluntariado
A través de un convenio por valor de 150.000 euros se distribuyen productos frescos en los comedores sociales de Gibraleón, Lepe, Isla Cristina, Ayamonte y Punta Umbría
El presidente de la Diputación de Huelva, David Toscano, ha visitado hoy el Comedor Social de Gibraleón, gestionado por la Asociación Olontense contra la Droga, en el marco del convenio suscrito entre la institución provincial y el Banco de Alimentos. Acompañado por la diputada de Servicios Sociales, Carmen Díaz, el presidente del Banco de Alimentos en Huelva, Juan Manuel Díaz Cabrera, el presidente ha querido poner en valor el trabajo que se realiza en estos espacios, que ofrecen no solo alimentos, sino también dignidad, acompañamiento y respeto.
En este marco se destaca que el convenio, con una dotación de 150.000 euros, ha permitido distribuir productos frescos —carne, pescado, frutas y verduras— en los comedores sociales de Gibraleón, Lepe, Isla Cristina, Ayamonte y Punta Umbría, mejora significativamente la calidad nutricional de las personas usuarias. Además, se han destinado más de 42.000 euros a acciones formativas dirigidas a mejorar la empleabilidad de personas en situación de vulnerabilidad, con cerca de 40 participantes hasta la fecha.
La presidenta de la Asociación Olontense contra la Droga, María Rodríguez, ha explicado el funcionamiento del comedor y ha afirmado que el cariño y el acompañamiento son fundamentales en la labor que desarrollan l@s voluntari@s en la asociación.
Por otra parte, David Toscano ha indicado que “hoy no venimos solo a comprobar cifras, sino a reconocer a quienes sostienen con su humanidad estos espacios: el voluntariado, los trabajadores sociales y todas las personas que acuden aquí cada día con la esperanza intacta”. Esta visita, asegura, es una forma de agradecer “el trabajo incansable del Banco de Alimentos y mirar de frente a una realidad que existe en nuestra provincia y que nos interpela como sociedad”.
Según afirma, el comedor social de Gibraleón —como los de Lepe, Isla Cristina, Ayamonte o Punta Umbría— no es solo un lugar donde se reparten alimentos, “es un refugio, es cercanía y, por encima de todo, dignidad. En este sentido el convenio de colaboración entre la Diputación de Huelva y el Banco de Alimentos, no se queda en lo material, sino que apuesta también por lo esencial: acompañar, formar, cuidar”.
La Diputación de Huelva continúa así trabajando por una provincia “más justa e igualitaria”, apoyando a quienes más lo necesitan desde un enfoque integral que combina atención inmediata y promoción social. “Porque ningún proyecto tiene sentido si se olvida de las personas. Y ningún plan de futuro se puede construir dejando a alguien atrás”, subraya el presidente de la institución provincial.
Por su parte, para el presidente del Banco de Alimentos en Huelva, Juan Manuel Díaz Cabrera, el convenio con la Diputación Provincial es “el mejor convenio de la historia del Banco de Alimentos, por lo que estamos muy satisfechos y agradecidos”. Por una parte, ha destacado que esta colaboración ha permitido ampliar el suministro para las personas usuarias, pasando de alimentos no perecederos a incluir alimentos frescos, que habitualmente no se incluían en los lotes: “van a tener una especie de crédito para ir comprando lo que necesitan, sin problema de fecha, puede tardar una semana o tres meses, con lo cual se optimizan los recursos”.
Asimismo, Díaz Cabrera se ha referido a la formación, “una actividad en paralelo, de alimentos y de inserción social, que llevamos a cabo desde el año 2018. El convenio, a través de una serie de cursos, ha venido a reforzar un aspecto que creemos absolutamente imprescindible y con visión de futuro, porque al final el objetivo es que es que haya menos personas que necesiten alimentos, porque tienen trabajo, y eso es algo a lo que contribuye la formación”.