El proyecto de la remodelación de la Plaza Niña ha sido una noticia destacada en las últimas semanas. Un hecho del que se habla mucho últimamente en la ciudad. Así, se ha cuestionado por una parte de la población la decisión de eliminar dos ficus de esta emblemática y centrica plaza de la ciudad. La posible problemática en cuanto a las raíces de estos árboles centran el debate, en el que se han realizado además diferentes concentraciones y acciones reivindicativas.
Sobre el tema, Partido Popular y Mesa de la Ría se han mostrado en contra en las últimas semanas, además la Asociación Huelvatemira, con el apoyo de Ecologistas en Acción, ha participado en diversos actos en este lugar a la que han asistido decenas de personas, apuntando las últimas informaciones al trasplante de los árboles.
Testimonio de algunos vecinos
Cuatro personas residentes o con negocios en el lugar han mostrado su opinión a Infonuba, de las que tres se han posicionado en contra y una de forma neutral
«Es un disparate, esta gente no sabe lo que hace», «Esta plaza tiene to el arte y la sombra es una de las cosas mejores que tiene», ha comentado un vecino muy enfadado. «¿Como si no hubiera otras cosas más importantes que hacer en Huelva y sus barriadas?, se pregunta indignado en voz alta.
«La naturaleza es la naturaleza y los árboles dan vida», indica otra vecina mostrando su desacuerdo a la vez que recuerda el estado de la antigua estación de trenes o el derribo del antiguo mercado de El Carmen para hacer aparcamientos.
Por otro lado, otro de los vecinos ha indicado que se debería de solucionar el problema de las raíces y dejar la plaza en el actual estado. «Me parece muy mal, se van a cargar la plaza, está muy bonita con los ficus», ha expresado.
Finalmente, una encargada de un negocio cercano se ha mostrado neutral al respecto. «Soy consciente del problema y quiero que se piensen bien su restauración», «Deben arreglarla porque las raíces me perjudican», advierte.
Las raíces, quid de la cuestión
La raíces son el órgano de la planta que la sustenta en el suelo y le ayuda a crecer. En los ficus son de «caracter agresivo» y buscan grandes cantidades de agua y humedad. Estos árboles pertenecen a la familia de las Moráceas, siendo originarios del continente africano e India. Las variedades comprenden más de 60 géneros siendo sus necesidades climatológicas asociadas a climas cálidos. Las raíces son el eje de la planta que crece en sentido inverso al tallo siendo equivalente al ocupado por la parte aérea. Cuenta con dos clases de raíces, pivotantes y fasciculadas. Con el tiempo algunos ejemplares pueden ser considerados «árboles monumentales».
«El Ficus benjamina puede dañar estructuras de edificios, piscinas, calles, etc. La respuesta es que en el caso de esta especie, no es de las más agresivas dentro de los Ficus. Si la planta se poda y controla su desarrollo… pueden pasar años hasta que puedan llegar a realizar algún tipo de daños», se ha publicado en floresyplantas.net.
Este árbol suele presentar una problemática en el desarrollo excesivo, principalmente de sus raíces, ramas principales y secundarias, así como el follaje; con sus consiguientes problemas de espacio, tanto en el propio jardín como en las jardineras, cuando traspasa su vegetación los lindes de la misma.
En los ficus, cuando las condiciones climáticas son óptimas, su crecimiento es muy rápido y en consecuencia los primeros daños se presentarán pronto al ser plantados cerca de las casas, jardines, bardas, piscinas, jardineras, etc. Asimismo se advierte desde Ecured que al poco tiempo se comenzará a tener problemas ya que sus potentes raíces terminaran dañando las estructuras de casas, bardas; invadiendo muros, rompiendo y levantando jardineras así como tuberías de drenaje e instalaciones hidráulicas debido a al rápido crecimiento de estas raíces.
Al respecto, es de destacar que una especialista en intervenciones en espacios públicos ha indicado en redes sociales que «el pavimento de la plaza no ofrece ninguna muestra de deterioro por las raíces. Sólo se aprecian las raíces muy desarrolladas en las zonas terrizas de los parterres. No parece que haya problemas relevantes de raíces en pavimentos ni en infraestructuras urbanas que estuvieran justificando la intervención. Ésta parece obedecer más a criterios estéticos y de funcionalidad para determinados eventos. Se debería de organizar unas jornadas de debate abiertas a toda la sociedad. No se puede seguir interviniendo en la ciudad como se hacía en el XIX, donde la opinión de la sociedad no contaba para nada. Ese tipo de sistemas tiene un nombre, y poco o nada tiene que ver con una democracia madura».
Recogida de firmas y movimiento ciudadano
En las últimas semanas se han recogido más de 600 firmas en papel a favor de la permanencia de los árboles y se ha puesto en marcha una campaña llamada «Que no talen los ficus de la Plaza Niña» en la plataforma Change.org, en defensa de los mismos e instando al ayuntamiento de la capital a modificar el proyecto inicial para conservar su atractivo natural. En este contexto, la Asociación Huelvatemira organizó el pasado día 8 de julio una tertulia bajo la sombra de esto árboles defendiendo la vida de estos organismos que contó con la participación del colectivo joven y con personalidades como Juan Cobos Wilkins, José Baena, o con las explicaciones especializadas de José Antonio González.
Texto e imágenes: Huelvatemira / José Carlos Sánchez Rodríguez (Infonuba)
Fuentes: Ecured /Floresyplantas.net
