- Las altas temperaturas y la sequía a nivel nacional, adelantaron los desbroces en el perímetro de la mina
El estado de sequía que sufre España por la falta de precipitaciones y las inusuales altas temperaturas que está deparando estos meses han hecho necesario modificar los planes ambientales anuales de la empresa. Así, este año el equipo de Medio Ambiente de la mina de Riotinto comenzó ya desde el pasado mes de abril, antes de lo previsto, las actuaciones que contempla su plan de cinco años que limita y minimiza la posibilidad de propagación de incendios.
En estas labores anti-incendios hay dos líneas de actuación principales que son los desbroces manuales y el mantenimiento de las líneas cortafuegos. Para el primer caso, este año se han ejecutado un total de 10.000 metros lineales de los 8.145 estipulados en el plan de Atalaya. «El plan que aprobamos el pasado 2020 contempla una serie de áreas sobre las que actuar. No obstante, si observamos que hay zonas cercanas que cuenten con un alto riesgo de incendio, las incluimos», ha destacado en este marco Emilio Sanjuán, responsable de Medio Ambiente en Atalaya Riotinto. En cuanto al mantenimiento de las líneas cortafuegos se ha actuado sobre un total de 7.600 metros lineales en este 2023.
Este plan preventivo, aprobado el 9 de julio de 2020, conlleva una inversión anual superior a los 20.000 euros y un equipo de 8 personas llevando a cabo las labores en campo, así como la estrategia y supervisión.
