El Coordinador Provincial de Izquierda Unida en Huelva, Rafael Sánchez Rufo, denuncia que las instrucciones que han recibido los equipos directivos de los centros educativos, por parte de la Consejería de Educación, para el inicio del curso escolar a partir del 1 de septiembre delatan “una irresponsable improvisación”, con la que esta Consejería demuestra que desconoce la realidad de los mismos y además “en vez de asumir sus responsabilidades, deja abandonados a los equipos directivos, sin recursos y sin directrices claras, para afrontar con seguridad” la vuelta a las aulas de más de 93.000 alumnos y alumnas onubenses.
Desde IU se ha denunciado esta semana que la Consejería de Educación, en las instrucciones enviadas, no establece la manera de proceder en caso de aparición de brotes del Covid-19 en los centros y ante la eventual necesidad de confinamiento de uno o varios grupos ni tampoco prevé alternativas ante la necesidad de cubrir las bajas del profesorado que tuviese que confinarse.
Asimismo, no se contemplan la realización de pruebas del Covid-19 para los docentes ni para el personal de riesgo, ni tampoco se ha recibido material (gel desinfectante ni mascarillas) en los centros, ni tampoco se prevé la necesaria limpieza y desinfección de los centros antes del inicio del curso escolar, en agosto, ni adaptar estas tareas de limpieza para incrementarlas, una vez se ponga en marcha el curso escolar.
Al respecto Rafael Sánchez Rufo ha destacado como especialmente grave que las instrucciones enviadas por la Consejería de Educación suponen que las autoridades educativas “se lavan las manos y descargan toda la responsabilidad en los equipos directivos, obligándolos a actuar como si fueran epidemiólogos en cada uno de sus centros”, ya que como denuncian los equipos directos, el asesoramiento por parte de la Consejería de Educación es “nulo”.
Desde Izquierda Unida se añade que la Consejería de Educación actúa sin tener en cuenta que la mayoría de los centros educativos superan la ratio máxima de alumnado por aula, y lo que es más grave, no ha hecho nada para acabar con la situación de masificación, incompatible totalmente con las medidas de distanciamiento social, que afecta a otros centros, como es el caso de los institutos de Aljaraque. Esto supone que con aulas que no superan los 60 metros cuadrados resulta imposible mantener la distancia de seguridad.
Asimismo desde IU se expresa que en cuanto a la dotación de personal necesario para garantizar la reducción de la movilidad y la distancia social del alumnado, la Consejería de Educación no prevé medidas suficientes para afrontar un inicio del curso escolar en condiciones mínimas de seguridad, ya que hasta ahora los planes de la Consejería consideran igual a un centro con 17 unidades que con 50.
Además advierten que las instrucciones carecen de criterios de adaptación de horarios alternativos ante un posible confinamiento o sobre la manera de actuar en aulas específicas como las de plástica, educación física o música donde la parte práctica en su desarrollo es muy relevante.
Para IU el grado de indefinición y las carencias de las instrucciones recibidas demuestra que los responsables de la Consejería de Educación desconocen la realidad del funcionamiento de los centros educativos.
Desde Izquierda Unida se añade que las instrucciones recibidas establecen medidas que son imposibles de aplicar en la inmensa mayoría de los centros educativos por no ir acompañadas de recursos para aplicarlas. Ante esta situación, IU remarca que «los grupos directivos y el profesorado se enfrentan a un inicio del curso escolar sin criterios, orientaciones y recursos suficientes ante una Consejería que se escuda tras un supuesto de autonomía y flexibilidad organizativa que no es más que una trampa para el personal de enseñanza y pone en riesgo la seguridad del alumnado y sus familias».