El informe presentado por el Grupo de Trabajo de la Sociedad Española de Epidemiología, a instancias de la Plataforma Recupera Tu Ría tras recoger 25.000 firmas de ciudadanos, abunda en la necesidad de realizar estudios epidemiológicos.
La Plataforma Recupera Tu Ría presentó el pasado seis de junio sus conclusiones sobre el Dictamen realizado por encargo del Defensor del Pueblo Andaluz sobre ‘El exceso de mortalidad y morbilidad detectado en varias investigaciones en la Ría de Huelva’. Los portavoces del organismo, Gonzalo Prieto, Pablo Herrera y Pedro Jiménez han anunciado que exigirán a la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía que cumpla las recomendaciones que hace el documento, que se ha realizado después de que la Plataforma Recupera tu Ría presentará 25.000 firmas de ciudadanos exigiendo un estudio que aclarara los excesos de muertes con cáncer detectados en Huelva.
El Dictamen presentado recopila los datos de 104 documentos médicos y científicos realizados hasta ahora que aportan conclusiones sobre muertes en Huelva y tratan de aclarar los motivos y el por qué la capital y el entorno superan las medias de mortandad andaluzas y españolas.
El Dictamen subraya que “se desconocen las razones concretas de la mayor mortalidad de la Ría de Huelva”, aunque pone de manifiesto un importante incremento de mortalidad por cáncer.
Entre las recomendaciones que hace el Dictamen y que la Plataforma Recupera Tu Ría hará suyas para que la Consejería de Salud y las instituciones pertinentes las cumplan está “la realización de un estudio epidemiológico de carácter prospectivo, con especial énfasis en la biomonitorización de los contaminantes en los habitantes en las áreas de interés para determinar la exposición real de la población e integrar en dicho estudio de cohortes pequeños estudios anidados en colaboración con las autoridades responsables de la vigilancia de la contaminación ambiental para evaluar el impacto de las emisiones contaminantes sobre los niveles de dichas sustancias en la población”. La Plataforma había propuesto la necesidad de realizar estudios de asignación de causalidad que determinaran en qué proporción las emisiones contaminantes de las fábricas del Polo Químico son responsables del incremento de patologías en la población onubense.
Otra de las recomendaciones rotundas que hace el informe es abogar por “potenciar los sistemas de vigilancia y alerta de situaciones meteorológicas que puedan producir elevadas concentraciones de contaminantes sobre la población del entorno de la Ría de Huelva, así como la vigilancia de un mayor número de parámetros ambientales, ya estén o no legislados”. El documento cree necesario “iniciar la operatividad de herramientas de pronóstico de impacto de las emisiones al aire de las industrias en el entorno de la Ría de Huelva, y en especial en la ciudad, para minimizar el efecto de elementos tóxicos, y en especial del arsénico, en la ciudadanía”. En la actualidad, existen métodos técnicos y científicos para prevenir el impacto y movimiento de masas contaminantes procedentes de las empresas del Polo Químico en los ciudadanos y la relación de éstas con la meteorología predominante. Es decir, cuando hay una previsión meteorológica de especial incidencia en las emisiones de las fábricas, evitar que se produzcan fenómenos contaminantes, o bien mediante reducción de emisiones en esa franja temporal o parada de la factoría.
El Dictamen pide también “apoyar a los servicios de prevención de las grandes mutuas de empresas para que realicen, en colaboración con investigadores independientes, estudios de cohortes retrospectivospara calcular tasas absolutas y proporcionales de su morbi-mortalidad e incorporar marcadores de exposición a medio plazo en los sistemas de vigilancia de la salud para agentes químicos asociados con enfermedades crónicas”. Y recomienda “aumentar la explotación de fuentes de información existentes, como las de morbilidad hospitalaria o incidencia de cáncer, que permitirían, por ejemplo, ofrecer datos sobre frecuencia de enfermedades en las áreas de interés, respecto de áreas similares pero sin presencia destacada de contaminación ambiental en su entorno”.
Además, el Dictamen entiende que hay que “mejorar la transmisión de información a la población en general y a los colectivos profesionales sobre los efectos conocidos de la contaminación ambiental sobre la salud”. Respecto a esta recomendación apunta que “una iniciativa concreta puede ser la constitución de un Foro de Salud Pública de la Ría de Huelva que suponga un canal estable de comunicación e intercambio de información sanitaria entre los distintos organismos de la Junta de Andalucía y los grupos y asociaciones ciudadanas más representativos de la sociedad civil de Huelva”.
Evaluar el coste de la restauración de la zona minera para frenar el drenaje de aguas ácidas de minas abandonadas en el Tinto y Odiel, fortalecer la vigilancia y el cumplimiento de la normativa sobre protección medioambiental y seguridad alimentaria en la zona de la Ría de Huelva y evitar que productos sin control alimentario procedentes de zonas prohibidas de pesca puedan llegar a los locales de restauración o a vendedores ambulantes son otras de las recomendaciones del Dictamen.
Y en lo que atañe a las balsas de fosfoyesos recalca que “en el caso de la recuperación del espacio ocupado por los fosfoyesos, monitorizar especialmente la captación de metales y radiactividad en el ecosistema de la cubierta vegetal”. Finalmente, el Dictamen cree oportuno “desarrollar las acciones sugeridas por la Comisión para reducir las desigualdades sociales en salud en España”.
El Dictamen ha contado con la participación del Grupo de Trabajo de la Sociedad Española de Epidemiología; Juan Alguacil, del Centro de Investigación en Salud y Medio Ambiente, Departamento de Biología Ambiental y Salud Pública (Universidad de Huelva); Ferrán Ballester, Centro Superior de Investigación en Salud Pública, Universidad de Valencia; Juan de Mata Donado Campos, Centro Nacional de Epidemiología, Instituto Carlos III y Departamento de Medicina Preventiva-Universidad Autónoma de Madrid; Antonio Escolar Pujolar, Delegación de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Junta de Andalucía, Hospital Puerta del Mar; Marina Pollán, Unidad de Epidemiología Ambiental y Cáncer, Centro Nacional de Epidemiología-Instituto Carlos III; Fernando Rodríguez-Artalejo (coordinador) Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública, Universidad Autónoma de Madrid. Y ha contado con la participación y sugerencias de Antonio Daponte, director del Observatorio de Salud y Medio Ambiente de Andalucía; y Jesús de la Rosa, Unidad Asociada CSIC-UHU de Contaminación Atmosférica y Centro de Investigación en Química Sostenible (CIQSO).
Imagen y fuente: Izquierda Unida Huelva.